Herpes Zóster
¿Qué es el Herpes Zóster?
El Herpes Zóster, o culebrilla, resulta de la reactivación del virus varicela-zóster, que origina la varicela.
Esta reactivación, que ocurre años tras la infección inicial, provoca una erupción dolorosa con ampollas en una región particular del cuerpo al viajar el virus a lo largo de los nervios hacia la piel.
Esta reactivación, que ocurre años tras la infección inicial, provoca una erupción dolorosa con ampollas en una región particular del cuerpo al viajar el virus a lo largo de los nervios hacia la piel.
¿Cómo se contagia?
El Herpes Zóster no se contagia directamente, pero el virus Varicela-Zóster puede causar varicela en personas no inmunizadas al entrar en contacto con el líquido de las ampollas de alguien con Herpes Zóster. Tras tener varicela, el virus permanece latente y puede reactivarse como herpes zóster en el futuro.
¿Cuáles son los síntomas?
El Los síntomas del Herpes Zóster pueden incluir dolor en un área específica del cuerpo, erupción cutánea con ampollas llenas de líquido, sensibilidad cutánea, picazón, fatiga, fiebre y malestar general.
Recomendaciones de grupos de edad y grupos de riesgo
- Se recomienda la vacunación contra el Herpes Zóster para adultos mayores, especialmente aquellos mayores de 50 años.
- También se recomienda para personas inmunocomprometidas debido a condiciones médicas como el VIH/SIDA, cáncer o trasplantes de órganos.
- Personas que no han tenido varicela o que no han sido vacunadas contra ella también deben considerar la vacunación.
Beneficios de la vacunación
- Prevención del Herpes Zóster y sus síntomas dolorosos.
- Reducción de la gravedad y duración de los brotes.
- Prevención de complicaciones graves como la neuralgia postherpética.
- Mejora de la calidad de vida al evitar el dolor y la incomodidad asociados con el Herpes Zóster.
- Reducción de la carga en el sistema de salud al prevenir casos y hospitalizaciones relacionadas con el Herpes Zóster.
Protege tu bienestar y tu calidad de vida: ¡Vacúnate contra el Herpes Zóster hoy mismo! No esperes a que el dolor y las complicaciones te afecten. Tu salud merece ser prioridad. ¡Actúa ahora para prevenir el Herpes Zóster y vivir una vida plena y sin preocupaciones!